Sudamericana
2017 – semifinales – vuelta –
Rojo 3 – Libertad
de Paraguay 1
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Incluso para los que dentro de unas pocas horas
tenemos que ir a trabajar, será difícil dormirnos. Si estuviste en la cancha,
la emoción y los cantos de la multitud volverán una y otra vez a tu cabeza
haciendo imposible el sueño.
Mirá, había que ganarle a River, a rasin, y clasificar
a la final de la Sudamericana . Hicimos
todo eso. Así que no analicemos tanto y disfrutemos este momento. Ah,
también quedamos a solo seis puntos de Boca
Fue un día especial. Se cumplían 44 años de la hazaña
en Roma, del gol del Bocha a la Juve, de la pared Bocha-Bertoni, de la
obtención de la primera Intercontinental. Todo el día sentí esa energía. Desde
la razón presentía un partido difícil contra los paraguayos de Libertad. Pero
la mística del día, la humillación causada a rasin el sábado y saber que la
cancha estaba totalmente vendida, que habría a la noche una inmensa marea
colorada caminando por Alsina y luego alentando en el Libertadores , me hacían creer
en que accederíamos a la final, que eso era irreversible. Así fue. Incluso
presentí los tres goles (tengo testigos). No creí que nos iban a apretar tanto
como lo hicieron en el segundo tiempo, siempre creí en una gala futbolera, en
una exhibición, en un partido abierto a partir de que íbamos a hacer tres goles
y a florearnos tipo hábil torero. Si no nos hubieran cabeceado tres veces
seguidas en el área, si no nos hubieran apagado la luz de golpe para que no
continúe la fiesta, pudo haber sido
así.
Fue un duro rival el equipo paraguayo. Experimentado,
copero. La del martes fue una buena prueba para el espíritu de los jugadores
del Rojo. El ambiente, el rival, la presión, no los quebró. Meza, el Puma, Barco,
Taglia, los puntos más altos. Fue todo tan emocionante… Este no es un blog de
putodista, ni siquiera de putodista partidario; como es un blog de hincha me
puedo permitir las disgresiones, mezclar la emoción con los hechos objetivos.
Bueno, un hecho irrefutable es que otra vez nos cabecearon mucho en el área. Y si
me pongo en Bilardo, te digo que no comprendí tampoco la posición de Benítez en
la cancha. Barco tiene que jugar por izquierda y Benítez por derecha. Silva
después mejoró, pero de entrada jugó inseguro. Domingo una bien y otra mal.
Faltó picardía en algunas jugadas, como en el último centro que cae al área
roja; es que el arquero de los paraguayos adelantó la bola tres metros, tiró el
centro que generó la última jugada de peligro ya casi en el cuarto minuto de
descuento. Hubo muchos pequeños errores
así, también muchos aciertos, claro, sino no seríamos finalistas. No hubo
cagadas como la del ex rasinguero Gómez
contra Gremio anoche, por ejemplo. No tenemos tampoco como Lanús dos tías en
chinelas que jueguen como centrales.
La cancha estaba muy anímica, cantaban todos, cantaban
quebrados por la emoción. Cantaba así el que estaba lado tuyo, el que estaba
adelante, el que estaba atrás. Hacia los quince del segundo tiempo el equipo
pudo salir del asedio un poco por el canto de guerra que bajaba desde las
tribunas y plateas. Toda la cancha cantó, insisto. Aparte, fueron 50 mil
futboleros. Los que tiene un grande de verdad para jugar de local estos
partidos. No había boludos, no había tantos exitistas. ¿Viste a Lanús anoche?
Llenaron la cancha con las mamás, el profesor de pileta, los alumnos que tiene
el profesor de pileta en otro lado donde trabaja, las tías del presidente del
club, dos pibes (que en realidad son de Boca o River) que trabajan en un lava
autos cerca de la estación (uno de ellos llevó a la novia) porque el viejo
rosquero de Nicolita Russo les había regalado plateas. Toda esa gente no cantó,
nunca, a pesar de los gestos desesperados de la llorona Acosta después que se
pusieron 1-2. Ni siquiera puteaban. Es el peligro de reclutar y de no tener
gente propia. Estaba helada esta estructura que no sé porque llaman “La
Fortaleza”. En cambio el Libertadores se prendía fuego.
Bueno, a esperar, y a tener listos los bolsos. ¿Será a
Barranquilla o será a Río de Janeiro donde tengamos que viajar? No importa. Vamos a dar pelea. Estamos en la final y hay mística. No somos Barcelona ni
PSG. Pero, pero, es nuestro mejor
momento en años. Holan formó un grupo, limpió a lacras tipo Denis u Ortiz, echó
a Pellerano (juega en el Olimpia, fue al hotel el martes que jugamos en
Paraguay a saludar a la delegación y a los 20 segundos de partido nos embocaron,
es perdedor y mufa ese), Holan después con ese grupo organizó un equipo, que
entrega lo mejor que tiene, que pasó una
prueba brava; le hizo tres goles en 20 minutos a Libertad , a quien le habían
convertido nada más que dos veces en esta copa.
Las finales se definen en los detalles. Un buen
detalle es descansar y no jugar contra Central el sábado, por ejemplo. Holan
tiene 15 o 16 jugadores a la orden, fue potenciando y trabajando, no tenemos una figura excluyente, varios están
jugando en buen nivel. El plus puede ser la mística. Ah, un minuto de silencio
para rasin que está muerto.
Saludos.
By j-les
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