Martín Campaña ayer contra Unión jugó su partido número cincuenta en el
Rojo. Y veintinueve veces de las cincuenta el arquero terminó invicto. Anoche el
uruguayo fue clave. Mi podio de la goleada roja anoche en Santa Fé es: Campaña –
Rigoni – Tagliafico.
Después de las intervenciones de nuestro arquero por suerte
pudimos meter el primer gol y ahí cambió el partido, se volvió totalmente
favorable a nosotros. Antes de eso, Martín Campaña había sido fundamental. Hasta el
primer gol de Rigoni se jugó mal, con problemas atrás y en el medio. Además estábamos inofensivos
adelante, con Albertengo que ni aguantaba la bola ni jugaba, con Benítez
reconvertido en el Benítez que tanto puteamos. En esos minutos nefastos, bancó
el partido Campaña.
Después el juego se armó para el Rojo, de contra
tuvimos como ocho situaciones claras de gol incluyendo un penal, que por
supuesto no sancionaron. Fue un violín el equipo durante el segundo tiempo. No,
un violín tipo father Grassi, eso no; tampoco un Stradivari. Un Stentor fuimos, un
Kreutzer. Ganamos muy bien porque es contragolpeador de fábrica el equipo del
profe Holan. Saca la ventaja y después por lo general, toqueteando en el medio, en los costados, filtrando adelante con los ligeritos Barco y
Rigoni, el Rojo consigue resultados y muchos goles. Es así, tiene que hacer el primer gol, Independiente. Sino, le cuesta. No sufre el
partido como si fuera Sarmiento o Patronato, pero ves a un equipo que calificaría con un seis, un seis y medio. Jugando
de contra en cambio es cosa seria, es de los más letales. En el fútbol argento el que hace el primer gol se
mete atrás, pero pocos contragolpean como el Rojo.
Como siempre, lo cagaron a patadas a Barquito. Encima
le hicieron penal, no lo cobraron y ¡lo amonestaron! Los referís son corporativos, cuanto más
lloremos menos van a proteger a Barco.
Repasemos algunos números. En la última fecha,la que viene, Rasin y bancien no podrían arreglar
un empate. Bancien no puede ir para atrás porque si pierde y a la vez ganan el
Rojo, el cuervo y ensuciantes, quedaría afuera de la próxima Libertadores. Le
encantaría a Falcioni ir para atrás contra Holan, pero no podrá. Rasin tiene
que ir a ganar al Lencho. El cuervo la tiene más accesible en Córdoba contra Talleres. Ahí habría que poner una suma, una tarasca como para motivar al tallarín; aunque sea para que le birle dos
puntos al cuervo. La papota, si hubiera, yo la invertiría en la T. Quilmes y ensuciantes, se
sabe, son viejos amantes homosexuales y entonces la birra (encima ya descendida) se va
a entregar en La Plata. Ensuciantes seguro va a la Copa. En el Gilmes de El
Estudioso no invertiría mis dólares de la motivación.
Si cuervo y rasin pierden, aunque sea derrota la
nuestra con Lanús y el equipo de Almirón nos alcanzara, aunque gane ñuls también
al Tomba en Rosario con un resultado lógico, por diferencia de gol estaríamos clasificados. Tenemos 16 goles de
diferencia a favor, rasin 9, cuervo 11, ñuls
12, Lanús 11.
Bueno, solo voy
decir dos cosas: primero, estoy muy contento con la posibilidad copera. Agradezco
al profe Holan y a los pibes este sueño. Como dijo un tuitero anoche, antes de
la llegada de Holan teníamos más
partidos jugados en el campeonato que goles a favor. Segundo, el martes próximo
hermano, hermano rojo, dejá la facultad, el laburo, la nocturna, el garchin,
dejá todo la puta madre, y andá a la
cancha. Esperemos al micro de los jugadores en Belgrano y Alsina o vengamos
cantando junto al bus desde el Puente Pueyrredón. Falta poco, estamos muy cerca
del objetivo principal del año, puede ser una gran noche. Este grupo de pibes
que nos ha representado muy bien, este D.T profesional e hincha del club, merecen
el respaldo presencial. Hace mucho que no jugamos la Libertadores. La posibilidad existe y los números respaldan a la manija que hay en todos. La última batalla será en casa. Los hinchas tenemos que estar.
Saludos.
By j-les